DISOCIACIÓN COGNITIVA FINANCIERA

Si pienso que no puedo alcanzar algo, ¿busco cómo quitarle valor a lo aparentemente inalcanzable?

La fábula de “La zorra y las uvas” nos enseña mucho en ese sentido. Dice la narrativa que una zorra ve un racimo de uvas e intenta alcanzarlo, después de varios intentos sigue su camino y dice, están agrias.

Desistir es normal, pero cuando lo hacemos y nos justificamos nos quitamos el poder de volver a intentar.

Existen muchos pensamientos que no dejan a las personas pasar de una clase social a una de mayor poder adquisitivo. No diré ninguno para que no haya alguien que se moleste por algún término utilizado… que a pesar de no ser mío y no creer en él me traerá adversarios.

La disociación cognitiva es cada vez más generalizada, me parece que por un intenso bombardeo que nos hace creer que no somos capaces de alcanzar las uvas. Nos dicen que somos incapaces, que por ser de una etnia u otra nos bloquearán, que por tener una nacionalidad u otra no tendremos oportunidades, etc.

Vemos ejemplos de personas que no lo han logrado a pesar de su potencial y nos convencemos de que nosotros tampoco alcanzaremos nuestro objetivo. Las bellas uvas se ponen agrias después de un par de intentos… o hasta antes de intentarlo.

La verdad es que puede ser más dificultoso para uno u otro, pero hay muchos ejemplos que muestran a los que llegaron como el camino a seguir.

Es típico hacernos las víctimas y entrar en una zona de conformidad. Sí, no es una zona de confort porque no es nada confortable. Queremos comer uvas y nos gustan dulces, no debemos desistir por no ser fácil alcanzarlas. Mucho menos convencernos, sin haberlas probado, de que están agrias para sentir conformidad por haber desistido. Si quieres ampliar tu zona de confort aquí te enseño cómo.

Veo gente quejarse de los pocos ingresos. Pero pocos se preparan para agregar valor a lo que ofrecen. Pocos se arriesgan a entrar en la zona de aprendizaje que les espera fuera de la zona de conformidad en que están.

Veo gente quejarse de sus deudas. Pero pocos se hacen protagonistas de su pasado, buscando qué los llevó a ese punto para no seguir cometiendo los mismos errores. Las uvas están agrias, me dicen tranquilamente. Pero no buscan en qué subirse para alcanzarlas.

En este sentido, no quieren reducir gastos, hacer un presupuesto, regirse por el mismo, quitar de sus adquisiciones lo que no es prioritario, dejar los lujitos y gastos superfluos, hacer “sacrificios” que no son tales porque sacrificarse es pasar todos los días pensando que el dinero no alcanza, ahorrar, etc. “Es que no se puede”; ves, las uvas están agrias.

Mientras busquemos la excusa encontraremos la disculpa perfecta… pero solo para nuestra mente.

El pobre puede obtener más recursos y salir de la pobreza. El de medios ingresos puede salir de las deudas. Y así por delante podemos darnos cuenta de nuestro potencial.

Buscar excusas no nos hace salir de la zona de conformidad, hacernos parte del problema y cambiar comportamientos y pensamientos sí.

Deja una respuesta