¿QUÉ ELEGIRÍAS HACER SI EL DINERO NO EXISTIERA?

¿QUÉ ELEGIRÍA HACER SI EL DINERO NO EXISTIERA?

¿Se ha preguntado cuál sería su ocupación favorita? Muchos soñamos dedicarnos a algo en nuestra vida y consideramos que ganarnos la vida haciéndolo sería el más maravilloso de los trabajos. ¿Es tan así?

En Villa La Angostura, Argentina, conocí una pareja que tiene un hotel muy acogedor. Eran de Buenos Aires y decidieron mudarse a las bellas montañas de ese pueblito a pocos kilómetros del famoso Bariloche. Las habitaciones eran cabañas preciosas hechas por ellos y decoradas con todo el amor.

Esta pareja había visitado durante un tiempo dos veces al año la región: en invierno a esquiar y en verano a pescar. Era su sueño vivir más cerca y evitarse los miles de kilómetros de viaje. Se mudaron, pues, y construyeron las Cabañas Lihuén en medio de ese paraíso, entre los lagos Correntoso y Nahuel Huapi.

Una vez viviendo en el lugar de sus sueños le tuvieron que dar calor a su emprendimiento. Ser guía de pesca y profesores de esquí eran parte de sus atribuciones. Ahora, trabajaban en lo que a ellos les gustaba. ¿Estaban felices? La respuesta que me dieron fue: “Ahora es un trabajo, antes era una diversión”.

Si el dinero no existiera, ¿a qué se dedicaría? Quizá la historia que acaba de leer le ha cambiado el punto de vista… Esa no es mi intención. La idea es que veamos las cosas en el lugar que tienen que estar. Ganarse el dinero haciendo lo que a uno le divierte muchas veces no es la solución. Lo que nos gusta debemos hacerlo por placer y no por obligación. Tener que levantarse a batear pelotas tiradas por una máquina es un trabajo… Ir a batear pelotas y tomar cervezas con los amigos es una diversión.

Siempre habrá jefes inadecuados para nosotros, compañeros no deseados, clientes insoportables… no importa el trabajo que elija. Lo importante es que reconozcamos qué nos molesta de nuestro trabajo. Es hora de encontrar esas cosas que nos hacen perder el ánimo y tomar una actitud ante ellas.

Si no podemos con el jefe, busquemos cambiar de departamento o de trabajo (ya sé, me dirá “no hay otros trabajos”, y le diré que si piensa así no tendrá oportunidades de conseguir otro jefe y debe agradecerle al que tiene de que aún le tenga trabajando… Siempre hay otro trabajo, se lo aseguro). Si son los compañeros, trate de conocerlos fuera del ambiente laboral, le certifico que son formidables personas, salvo alguna manzana podrida. Si es la paga, dé la milla a más, prepárese para subir de puesto, para representarle más ingresos a la empresa y merecerse un aumento, busque ingresos extras, cambie de trabajo… En definitiva, “lo que le molesta está sólo en mis manos cambiarlo”.

Buscar el trabajo que se adapte a nuestra diversión es difícil y suele echar a perder lo que nos recrea. Hacer que mi trabajo me guste con el objetivo de ganar dinero suficiente para tener una buena calidad de vida y practicar mi diversión es lo que llamaría tener el trabajo perfecto para mí. No olvidemos también, tener el tiempo necesario para dedicarle a todo lo que me hace feliz en la vida.

FRASE DE LA SEMANA
“Es más fácil y productivo hacer que mi trabajo me guste a buscar un trabajo que me deleite.”
Diego A. Sosa
Coach, consultor, Conferencista y Escritor

Esta públicación tiene 2 comentarios

  1. Valeria

    Si el dinero no existiera me iría a instalar a una cabaña en Bariloche a escribir todo el dia mirando el lago Nahuel Huapí. Simplemente eso.
    Ah y con mate y bizcochitos en mano… y chocolate local, obvio.
    QUe lindo soñar así 🙂

Deja una respuesta